El abogado, Teodoro Sanromá, luego se pone a investigar y intentar defender al chico, ya que este se declaraba inocente. Y así fue, después de investigar Teodoro lo descubrió todo, quien mató a la medre de Fernando fué su hermano, Juan Manuel Pedrosa. Este al final de declara culpable.
En mi opinión es una historia muy divertida, como todas las que e leído de Jordi Sierra i Fabra y muchas veces no puedes parar de leer porque quieres saber que más va a pasar.
Mi valoración: 10/10
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